El asesinato de Valeria Márquez, joven influencer y empresaria de apenas 23 años, ha sacudido a la comunidad de Zapopan, Jalisco, y ha generado una ola de indignación en redes sociales.
A medida que avanzan las investigaciones, nuevos elementos van surgiendo, aunque hasta ahora no se han realizado detenciones, lo que mantiene en vilo tanto a su familia como a sus seguidores.
Valeria se encontraba en su salón de belleza, Blossom the Beauty Lounge, cuando fue atacada mientras realizaba una transmisión en vivo en TikTok. Un individuo ingresó al lugar haciéndose pasar por repartidor, preguntó por ella y la agredió a corta distancia.
Aunque parte del incidente fue captado por la cámara del celular durante el live, la grabación fue interrumpida abruptamente por una de sus colaboradoras, lo que dejó más preguntas que respuestas.
Las autoridades estatales han calificado el hecho como un feminicidio, y trabajan con varias líneas de investigación. Hasta el momento, se han recabado más de veinte testimonios, incluidos los de familiares cercanos y Erika, la empleada que estaba presente en el local durante el ataque.
Ella colaboró en la elaboración de un retrato hablado del presunto atacante, pieza que podría ser clave en los avances del caso.
Uno de los puntos más relevantes en las últimas horas ha sido la revisión de las cámaras del sistema C5, parte del programa de videovigilancia del estado.
Estas cámaras habrían captado a los posibles responsables mientras huían, lo que permitió a los investigadores seguir su ruta tras el ataque.
También fueron retirados los dispositivos de seguridad del propio salón de Valeria para su análisis, aunque se informó que algunas imágenes no son lo suficientemente claras, lo que ha dificultado su uso como evidencia concluyente.
Otro detalle que ha llamado la atención es el hallazgo de flores y una nota con la palabra “Perdón” en la entrada del establecimiento poco después del incidente.
Este hecho ha dado lugar a distintas especulaciones sobre una posible conexión personal entre la víctima y el agresor, aunque las autoridades no han confirmado esta línea como prioritaria y se mantienen discretas para no entorpecer la investigación.
De acuerdo con declaraciones ofrecidas al medio Milenio, Sonia Álvarez Cisneros, fiscal especializada en Concertación Social de Jalisco, afirmó que aún no hay detenidos, pero que se cuenta con información valiosa proporcionada tanto por los testigos como por áreas de inteligencia cibernética.
Según explicó, la Policía Cibernética trabaja activamente para recopilar datos a partir de redes sociales, mensajes y dispositivos que pudieran aportar detalles relevantes.
La familia de Valeria continúa exigiendo justicia. Su abuelo, visiblemente afectado, pidió públicamente que su muerte no quede impune y que se dé con los responsables lo más pronto posible. Una tía de la joven la describió como una mujer llena de vida, empática y generosa, y pidió que se analice cuidadosamente todo el material audiovisual, incluida la grabación del live, ya que podría contener información crucial.
El caso de Valeria Márquez ha resonado con fuerza en el país y ha reabierto el debate sobre la seguridad de las mujeres emprendedoras y figuras públicas que se exponen diariamente en redes sociales. Mientras tanto, el llamado de la familia es claro: verdad, justicia y cero impunidad. La expectativa ahora recae sobre el actuar de las autoridades, quienes enfrentan la presión social de resolver este crimen que ha dejado una profunda marca en la opinión pública.