La partida de Jailyn, una bebé de solo 16 meses, ha sacudido a la comunidad de Cleveland (Ohio) y ha dejado una huella imborrable de dolor y consternación.
Su madre que lleva por nombre Kristel Candelario, fue condenada a cadena perpetua por su negligencia, durante ocho largos días, del 8 al 16 de junio de 2023, Jailyn quedó desatendida en su hogar mientras su madre se encontraba de vacaciones en Puerto Rico y Detroit.
La pequeña fue encontrada en mantas sucias, rodeada de heces y orina, en un estado de hambre y deshidratación severa. La médico forense del condado de Cuyahoga, Elizabeth Mooney, reveló en la audiencia de sentencia que Jailyn partió debido a la negligencia de su madre.
La niña había perdido 7 libras de peso en menos de dos meses, Michael C. O’Malley, fiscal de Cuyahoga, expresó con indignación que Jailyn partió por el egoísmo inimaginable de su propia madre.
Mientras tanto, Kristel Candelario, en un intento tardío por enfrentar la realidad de sus acciones, expresó su arrepentimiento ante el tribunal, rogando perdón a Dios y a su hija cada día.
La sentencia no fue otra que cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, un justo castigo por el abandono de un ser inocente e indefenso. En la memoria de Jailyn queda el recuerdo de una vida truncada por la negligencia materna.
Una historia que nos recuerda la importancia de cuidar y proteger a los más vulnerables de nuestra sociedad.
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